Un seísmo de magnitud 2,7 grados en la escala de Richter se registró durante la noche del pasado 15 de diciembre, cuyos efectos se pudieron notar de manera más intensa en Ossa de Montiel, la localidad más cercana al epicentro, pero que también se dejó sentir en El Bonillo y Munera. Según el Instituto Geográfico Nacional (IGN), el pequeño seísmo se produjo a las 22 horas 56 minutos y 41 segundos, y la profundidad del epicentro de este se situó en los 3 kilómetros.

.

Clic en la imagen para acceder al artículo completo